Jesús Margarita Soricich cumplió 79 años el 4 de febrero. “Es mi edad cronológica, de mente y de cuerpo me siento de 40…”, asegura. “Bueno, del físico no tanto, a veces…”, aclara y se ríe. Margarita se ríe seguido. Es una mujer que celebra los momentos, vive la vida y quiere más. Hacer Neurogym, la gimnasia para la mente que la Fundación León le propone todos los martes de manera virtual, la ayuda a sostener su lazo social y la mente activa.
“Quiero aprender cosas. No quiero quedarme haciendo nada sólo por ser grande y jubilada. Me gusta ser sociable”, destaca Margarita su filosofía de vida. Gracias al dispositivo de prevención de la fundación -cuenta- evitó “estancarse” cuando la pandemia paralizó y aisló al mundo.
“Yo iba a un Centro de Jubiladas a la vuelta de mi casa, pero cerró por la pandemia. Busqué qué hacer y por el Facebook de la fundación me enteré de Neurogym”, relata la vecina de Ciudadela, barrio en donde reside con su hija de 46 años, una nieta de 20 y un nieto de 18.
“Me gusta Neurogym por las actividades y ejercicios que hacemos y que nos dan para hacer en casa, y porque te conectás con otras personas”, remarca la protagonista. Margarita fue docente (profe de Biología) durante 40 años.
¿Por qué buscó y eligió Neurogym? “Buscaba hacer valer mi tiempo en algo. Estar en la casa sin hacer nada es horrible. Compré mi propia computadora para poder estar conectada y a través de Neurogym estar con otras personas. A veces salgo corriendo a pedirles ayuda a mi hijo o a mis nietos…”, admite (y se ríe) Margarita, la que cumplió 79 y se siente de 40.
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