“Se trata de compartir la mirada propia, con el convencimiento pleno y genuino de que una es parte de una institución que trabaja por el bien común, por el otro, para el desarrollo de aspectos nodales en todo proyecto de vida, de país. En la Universidad tendré la misma función….”
Las palabras pertenecen a María Laura Canigia, vicepresidenta de León y desde este viernes, 31 de mayo, representante del estamento Egresados en el Consejo Superior de la Universidad Nacional de Tucumán por el período 2024-2026.
“Me siento honrada y agradecida de formar parte del honorable Consejo Superior de la Universidad Nacional de Tucumán. Es la Universidad pública y gratuita donde me formé y eduqué. Es la que me dio espacios para el conocimiento y la investigación”, destacó Canigia.
“No es menor formar parte del Consejo Superior de la Universidad. Es un espacio en el que se escuchan todas las voces y en el que todas son admitidas”, remarcó.
Canigia realiza su juramento
ante la vicerrectora de la UNT.
“A esta altura de mi vida, cuando ya terminé mi recorrido laboral, sigo soñando lo mismo que el primer día: ser docente, estar frente a un aula, con alumnos, para que otros aprendan. Creo profundamente en la educación; es un derecho de todos, del que nadie puede ser cercenado. Este rol en el Consejo es noble, sentido y comprometido. Es un trabajo que nos permite honrar y honrarnos”, añadió la educadora.
Por último, subrayó su doble función, en la Sociedad Civil y en el ámbito universitario. “León y la UNT son dos espacios en los que tengo roles muy valiosos, así como sus redes para trabajar. Estoy convencida que siempre se construye junto a otros, a muchos otros que forman parte de otros estamentos, tanto de la Sociedad Civil, de los espacios religiosos, el Estado o el sector privado”.
“Seguimos pensando en tejer redes para colaborar con una sociedad más justa, equitativa y habitable para todos”, auguró.
Canigia fue acompañada por el
director ejecutivo de León, Diego Aguilar y la
consejera Nilda García Posse.
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